Las transacciones ilícitas de criptomonedas ascendieron a 40.900 millones de dólares en 2024, de los cuales el 63% se llevaron a cabo utilizando monedas estables, informa Chainalysis. El volumen final proyectado es de 51.300 millones de dólares.

Las transacciones delictivas representan sólo el 0,14% del volumen total de ventas de criptomonedas. La mayor parte de los fondos robados (2.200 millones de dólares) procedieron de Defi, y los piratas informáticos, incluidos los de Corea del Norte, robaron una cifra récord de 1.340 millones de dólares.

La inteligencia artificial se utiliza activamente en el fraude, incluso en ataques altamente personalizados. Los mercados de la Darknet recibieron 2.000 millones de dólares y las tiendas fraudulentas redujeron los ingresos a 220,1 millones de dólares. Las redes del crimen organizado atrajeron 10.800 millones de dólares del total.

A pesar de la popularidad de las monedas estables, Bitcoin sigue siendo la principal herramienta del ransomware y los mercados de la red oscura. Monero no fue incluido en el informe.